La vos de mi pueblo: "DIARIO DE BIENSERVIDA" Nº 530 Por D. Luís Serrano
DIARIO DE BIENSERVIDA.
La voz de mi pueblo: nº 530
Buenos días amigos. Hoy seré brevísimo, lo prometido es deuda, para los que no podais asistir al pregón de las fiestas de nuestro pueblo Bienservida, este es el “PREGON” que estaré soltando cuando lo esteis leyendo siempre y cuando empeceis a las 21h.
Buenas noches queridos paisanos. Hace quince días, nuestro alcalde Javier, me llamó y sin mediar palabra me espetó. He pensado en ti para que seas el Pregonero de las fiestas. Como soy franco y largo de boca, me faltó tiempo para aceptar. A mí los dulces no me amargan aunque estén hechos con sal.En la vida, los mortales nos regimos por emociones que normalmente suelen ser lisonjeras, de ahí que sea fácil llegar al orgasmo físico y un poco más difícil al espiritual EL EXTASIS. Escuchar a Javier, salir corriendo, tomar cabeza, pluma y llegar a gozar física y espiritualmente fueron segundos.
Pero me paró el Alcalde ¡cómo los buenos toreros! Y me espetó las banderillas - Sólo una cosa te pido- Has de callar al menos diez días- Quiero yo dar la sorpresa. ¡No banderillas, el estoque en las crucetas! ¡Hacerme callar a mí! Acepté y cumplí. Yo sé lo que me costó. Yo os pido a vosotros que os calléis, al final tiempo tendréis de patear.
Y aquí me tenéis. Vestido pero desnudo, dispuesto a haceros sonreír.
Mis primeras palabras y las más serias, quiero vayan dirigidas a todos los Alcaldes que ha tenido Bienservida, en todas las épocas. Estoy seguro que todos, sin excepción, pusieron lo mejor de ellos al servicio de su pueblo. A todos ellos mi aplauso que quiero sea el de todos vosotros.
Pregón.....me puse a meditar y deduje que esta palabra habla de Presente y de Futuro. Sardinas frescas en la Puerta de la Hermana Juana...De orden del Sr. Alcalde la semana que viene se pondrá al cobro el recibo de la contribución.
Ya tenemos una forma del presente: Las sardinas y una forma del futuro: La contribuciónSi hay presente y hay futuro por fuerza ha de haber pasado. Y el pasado me remonta hacia los cuarenta, con una plaza llena, en fiestas. Con un hombre alto, recio que no gordo, con mangas de camisa alargadas y pantalón de pana. Serio, moreno de sol de agosto. Con una gorra sobre su cabeza, los testículos de un novillo en su mano derecha levantada y una cuerna en la izquierda que reluce a los últimos rayos del sol. Es Miguel el Ciego.
Con voz potente, subido a una silla, entre las casas de Juan Antonio Garriga y de Benito Valero, grita mirando al cielo, ¡¿Cuánto dan por los huevos del vaco!?
El pueblo ruge y calla, alguien dice dos duros y se adjudica al momento.Pero una juventud que no sabe la historia de su pueblo, nunca podrá llegar a conocerlo para poderlo querer.
Las escuelas vacías, las casa tan bien. El pueblo ocupaba la calle del Pozo y la Plaza. Sartenes, trompetas, y hasta timbres de bicicleta atronaban el pueblo. Las campanas tocaban, eran las tres de la tarde. Don José el Cura, con sotana remangada vociferaba hablando de infiernos eternos. El pueblo ya estaba condenado, más no muerto y mucho menos callado.
En la plaza la guardia civil con fusiles y vergajos estaba atenta a detectar cencerros, las bragas de nuestras madres y hermanas dejaban traspasar ruidos sonoros como si llegaran las cabras de la trashumancia a parir a nuestra plaza.
El Hermano Lucio, viudo de la Sierra, con la conveniencia de Cura y Guardia Civil había desafiado al pueblo. Se quería casar al mediodía sin invitar al pueblo. Un pueblo no aguanta la soberbia y se impuso lo que pudo, no pudiendo evitar la boda, si consiguió el envite, luego de ser acompañado hasta la sierra con gritos y canciones.
Este pasado coincidía con la apertura en Bienservida de muchos talleres de artesanos, los chiquillos frecuentábamos fraguas, zapaterías y barberías. Famosas fueron las del Hermano Fidel, Quico el de Arturo y el Hermano Pedro Pablo, en fraguas.
En Barberías Pepe el Barbero, El Hermano Carmen y Pedro el Ratón, esta en razón a la juventud de Roque y Pedrin que aprendían el oficio, era la más frecuentada.Pero me piden sea breve (otra estocada) y debo hablar del futuro. Este pueblo como todos labró su futuro con el sacrificio de los que marchamos de él, unos por necesidad otros por vocación. Los que nunca habéis salido a vivir fuera de aquí ni imaginar podéis la alegría que da encontrarse con un paisano- dije que no habría penas en esta disertación.
La primera vez que visité Galicia a pasar unos días con mi novia, aquí presente convertida en Madre y esposa amantísima, aconsejado por ella y tomé pensión en Casa de Doña Anuncia. Era la de los curas y por tanto sinónimo de buen comer, mi entrada al medio día al comedor, pudo ser mortal. Entre dos curas y con un manojo de hoces sobre una silla, me creí morir de alegría al divisar sentado entre la curia, presidiendo la mesa a Manolito Izquierdo, representaba alas hoces de Bienservida. Fueron abrazos divinos. Entre los dos nos hicimos con la pensión. Luego comiendo casi dejamos sin comida a los Curas.
He hablado de Curas y voy a robar un minuto para lisonjear pues lo merece la figura campechana, sin sotana, sudorosa, siempre corriendo a ayudar. De este pastor traicionero que me robó el corazón el día que le conocí. Lo primero que hizo sin conocerme, fue darme las llaves de su casa. Y lo gordo es que yo se las tomé. Sencillamente en ese momento nos enamoramos, nos compenetramos.
Nunca en la vida me había pasado eso y así reaccioné. Ni le di las llaves. Ni le di las gracias. Todo natural. Así es Juan Angel, un hombre cura, un ángel que vive en Bienservida.
Acabo, que el tiempo pasa, y no puedo irme de esta plaza sin que sepáis que desde hace dos años y con el lema Diario de Bienservida cada día hago llegar de lo que me entero y pasa en este pueblo a doscientas personas, gracias por aguantarme, sobre todo por no ser muchos de este pueblo. Se envía a siete países, hasta Australia, allí con los canguros que ya saben escribir Bienservida y dentro de un año espero llegue diariamente a todos los países del mundo.
Debo deciros que lo primero que hago al levantarme es teclear al menos diez veces el nombre de nuestro pueblo. De ahí que creo que nuestro alcalde no se equivocó al nómbrame pregonero. He puesto lo mejor de mismo para haceros felices unos minutos. Me alegraría haberlo conseguido. Muchas gracias. ¡Vamos a divertirnos!
ME PIDIERON FUERA BREVE
EL PREGON SE ESTA APAGANDO
COMO SE APAGAN LAS BRASAS
QUE EL AGUA ESTA YA BESANDO.
GRACIAS MUCHAS. BUENAS FIESTAS
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luis serrano -
Loli -