La voz de mi pueblo: "DIARIO DE BIENSERVIDA" Nº 719 Por D. Luís Serrano

Domingo 30 de Marzo de 2008.
La voz de mi pueblo.
Diario de Bienservida 719º.
Seguimos con el tiempo parado y el reloj una hora más atrás, pero el resto en el mismo sitio, por lo que me voy a remontar al pasado día 26, miércoles a las 9 de la mañana cuando con mi taxista Bernardo llegamos a la Estación del Norte para subir al autobús que transporta Senior, otros llaman abueletes, a Calpe junto al Peñon de Ifach.
La primera viajera que encontramos venia de Comisaria de denunciar el robo de su bolso nada más llegar a la Estación a las 8 de la mañana, por lo que deduje que el tiempo de espera en una estación debe ser el mínimo. Le afanaron 500 Euros, tarjetas y joyas, devolviéndole la documentación y los adminiculos de ponerse guapa.
Dentro del autobús un viejo que viajaba sólo y con alguna copa de anis de más, animó el cotarro las dos primeras horas, cayendo rendido, chistes sin gracia, apoyados en la Viagra, con pocos puntos de apoyo graciosos y en el Delta del Ebro parada a minguitorios y a enjuagar gaznates. Comida en Torreblanca donde recordé que hacía unos años un autocar del Inserso volcó con 20 muertos; comprendo me pasé de cruel.
Comida y hasta el area de servicio de Gandia para sencillamente mear y a las 6 en punto entrada al Hotel Esmeralda de Calpe con el pié cambiado pues era la hora de mear del cielo. Cien gotas y al mostrador a elegir Habitación, me hice el Suizo y a la despachante le dije no conocía el mar para que me diera habiatación con visas a el. No se dio cuenta que venía de Barcelona. , y me dio una Suite desde la que veía el mar de la ola eterna el día que toca. Sencillamente una balsa de aceite y esta mañana al madrugar ví mi primera ola, una ola silente, de paso portugués, lenta, tan lenta que comencé a seguirla y me quedé dormido antes de que besara la arena de la costa.
Lei un articulo enardeciendo a la Viagra, medicamento del que los abuelos no paran de hablar y como quiera que lei que se emplea para curar el mal de los aviones trasatlánticos el Jet yo no sé qué o sea que te pasas dos días zumbados, después de llegar de la habana, pensé en que nuestro amigo Chencho que cruza el Oceáno más veces que Marteles cuando estaba en activo, sería el ideal para que nos hablará sobre la Viagra, pues imagino que en sus frecuentes escapadas a España debe pasarlo mal.
Hablé ayer de Gabriel Miró y olvidé deciros que estudio en Santo Domingo, en Orihuela, el querido Colegio de muchos lectores; esta mañana contemplando el Cementerio de Polop y el león Dormido (montaña así bautizada por él) y visitando la fuente que erigió con 112 caños con adornos de preciosos escudos en cerámica de los pueblos del reino de Valencia más importantes me acordé del detalle y olvidado ayer os lo pongo hoy. Vivió casi 100 años y murio en 1987.
Pero ayer os dejé justo cuando entré en compañia con nuestro querido Pichón, compañero de Orihuela, como buen palomo, es excelente navegante y logicamente eligió para invitarnos a comer el Club Naútico de Calpe, al pié del Peñón, con la seguridad de que si éste caía lo haría sobre nosotros y solo podriamos salvarnos nadando bajo el agua.
La comida excelente predominando el magnifico arroz a banda y de ella simplemente quiero resaltar la maravillosa sensación que sentí al probar un vino del que me acabo de olvidar. Costera no se qué, lo apunte no recuerdo donde y solicitoa Guillermo me dé pelos y señales de él, puesto que es un vino que fresquito equivale saborar una estupenda uva moscatel, algo sensacional, zumo de uva, transformado en vino excelente. Hablamos de lo divino y de lo humano y pasamos unas horas de lo más agradable.
Quedamos citados en Bienservida para deleitar allí nuestro excelente Zumo de Oliva. Y soy parco pues es tarde y quiero ver entero el partido Sevilla Madrid que cobra interés infinito después del desastre de Villamarin, la agonía de un Barcelona que hace pasar una Semana Santa cruel a sus fanáticos seguidores.
Mañana si Dios quiere tengo cita con compañeros en Elche, la comida será narrada logicamente en los detalles sobresalientes, que siempre los hay. Saludos Luis.